La enfermedad por el coronavirus SARS CoV2 ha supuesto un reto para todo el sistema sanitario mundial. La nefrología no podía quedar al margen de ello. En esta pandemia la Comunidad de Madrid ha sido una de las zonas más castigadas a nivel mundial. Por ello, la asistencia nefrológica en la Comunidad ha tenido repercusiones muy importantes. Más de 500 pacientes renales han presentado infección por Coronavirus. El paciente renal es un paciente de riesgo muy elevado para COVID-19 por su situación de inmunosupresión y elevada comorbilidad. Esto ha llevado a que desde SOMANE se haya tenido una especial de dedicación a estos pacientes.

Los pacientes con enfermedad renal crónica (ERC) presentan una situación de inmunosupresión relacionada con su enfermedad que les hace más susceptibles del contagio y de la mala evolución de la enfermedad COVID-19. Además son pacientes con múltiples comorbilidades, especialmente cardiovasculares, HTA y Diabetes, y múltiples tratamientos que hacen que su evolución pueda ser más complicada y peor, con riesgo de muerte más elevado. Esta situación se agrava además en los pacientes trasplantados, en los que el tratamiento inmunosupresor que toman aumenta su riesgo, con el agravante que no puede ser suspendido, ya que el riesgo de rechazo del trasplante sería muy elevado. Por eso en ellos, junto con los pacientes de diálisis domiciliaria (Hemodiálisis Domiciliaria y Diálisis Peritoneal) hemos insistido más en el aislamiento, utilizando la telemedicina y evitando su asistencia al centro hospitalario.

Sin embargo, una de las áreas más conflictivas en esta pandemia a nivel renal ha sido la de hemodiálisis. El paciente en HD, además de las características del paciente con ERC, añade una serie de circunstancias que le hacen más vulnerable y de mayor riesgo de contagio:

1. La imposibilidad del confinamiento, al tener que acudir tres veces por semana al centro hospitalario, con el riesgo de contagio que ello conlleva.
2. El transporte en ambulancias colectivas en las que existe un mayor contacto con pacientes que pueden estar infectados sin haber desarrollado la enfermedad.
3. El contacto frecuente con el personal sanitario, fuente importante de contagio.
4. Muchos de nuestros pacientes viven en residencias de ancianos, donde el contagio ha sido muy elevado. Estos pacientes infectados, podrían extender el virus por las unidades. Estas características han hecho que aproximadamente un 70 % de los pacientes renales positivos para COVID-19 estén en HD.

La Comunidad Nefrológica Madrileña rápidamente puso en marcha medidas de triaje en las unidades encaminadas a la detección precoz de pacientes COVID positivos y su aislamiento. Se ha hecho un gran esfuerzo para el aislamiento de estos pacientes en salas de HD propios, casi siempre en centros hospitalarios. Los pacientes de centros concertados extrahospitalarios, que han sido un número muy elevado, se han desplazado en su gran mayoría a centros hospitalarios. Estos centros, ya de por si saturados han hecho un enorme esfuerzo por asumir esta carga elevada de pacientes añadidos.

Por otro lado, desde el inicio sabíamos que se podían generar problemas con el transporte sanitario. Conocíamos la situación de saturación de los centros hospitalarios. Por ello éramos conscientes de que todo paciente positivo que pudiera estar ambulante debería mantenerse en su domicilio. Por ello SOMANE se puso en contacto con el SUMMA para establecer un sistema de transporte individual para los pacientes positivos. Así mismo se establecieron circuitos para no mezclar a pacientes que habían compartido ambulancias con pacientes positivos con otros pacientes. Aunque inicialmente se generaron diversos problemas, posteriormente este circuito ha funcionado de forma adecuada. La conexión SOMANE, SUMMA, ALCER y Empresas de Transporte sanitario ha sido fluida, permitiendo este funcionamiento.

También desde SOMANE teníamos certeza de la situación de incertidumbre y falta de evidencia con la que nos movíamos los nefrólogos. Teníamos que potenciar el contacto entre todos y compartir experiencias.

Por ello pusimos en marcha un grupo de información online para compartir experiencias, dudas y temores. Rápidamente se han ido incorporando nefrólogos de toda España, hemos podido aportar nuestras vivencias y obtener información muy valiosa.

Aunque a día de hoy el número de pacientes positivos es muy elevado, especialmente entre los pacientes en HD, creemos que hemos conseguido desarrollar un sistema de gestión que nos ha permitido disminuir de forma progresiva el número de contagios. Creemos que estamos en buena dirección, pero no podemos bajar la guardia y esta experiencia nos debe hacer pensar que tenemos que desarrollar sistemas que nos permitan detectar y prevenir nuevas pandemias.

Fuente: medicina21.com