«Es un magnífico dato», valora el SES, que agradece la generosidad de las cinco familias que ayudaron a salvar vidas.
El hospital de Plasencia facilitó la donación de 23 órganos en su primer año de actividad como detector de potenciales donantes, según los datos facilitados por el SES (Servicio Extremeño de Salud). En concreto, se consiguieron ocho riñones, seis córneas, cuatro pulmones, tres hígados y dos corazones, procedentes de cinco fallecidos.
Dos de ellos eran pacientes del área de salud placentina que estaban siendo atendidos en el servicio de Neurocirugía del hospital San Pedro de Alcántara, unidad de la que no dispone el Virgen del Puerto. Los otros tres fueron detectados directamente en el centro sanitario placentino, gracias a una labor que coordina el doctor Fernando Bueno Andrés y que implica principalmente al personal de la UCI (Unidad de Cuidados Intensivos), con la colaboración de los servicios de Neurología y Urgencias.
«Cinco donantes del área de salud de Plasencia es un magnífico dato de potencialidad», valora el SES, que agradece públicamente el altruismo de estas familias. «Son muchas vidas salvadas o mejoradas gracias a esa generosidad de quienes pensaron en ayudar a los demás en un momento doloroso y difícil», destaca la Consejería de Sanidad y Políticas Sociales.
El área de salud ha aportado al sistema, entre otros, ocho riñones, cuatro pulmones y dos corazones
Más si cabe en el caso de Plasencia, cuyo hospital es centro detector pero no extractor, lo que implica que los posibles donantes sean trasladados a Cáceres, con las incomodidades que esto pueda causar a las familias en un trance tan delicado. En la capital provincial se extraen los órganos, que finalmente son implantados a pacientes de cualquier punto de España, en muchos casos personas que llevan meses o años esperándolos.
Aparte del beneficio vital que supone para estos enfermos, el hecho de que el hospital de Plasencia sea centro detector de potenciales donantes significa también que la población de su área de salud puede ejercer su derecho a donar órganos, una última voluntad que en ocasiones supone un consuelo tanto para el enfermo como para sus allegados.
Fuente: Periódico Hoy.